Aconsejar a Dios

Mateo 14,15 Como ya se hacía de noche, los discípulos
se le acercaron y le dijeron: —Ya es tarde, y este es un
lugar solitario. Despide a la gente, para que vayan a las
aldeas y se compren comida.

Algunas veces tenemos la tentación de decirle a Dios
qué es lo que tiene que hacer en nuestra vida, en el
mundo o en las personas, como si Él no fuera omnisciente,
o nosotros supiéramos más que Él.

Dios sabe perfectamente cuál es el mayor bien para
tu vida y la mía; Él tiene un plan perfecto para nuestra
salvación y nuestra felicidad, sólo debemos disponernos
para cooperar con Él en ese plan; ello incluye
oración, confianza, docilidad y obediencia; sabiendo
que todo sucederá para nuestro mayor bien. Vivimos
acostumbrados a controlarlo todo y a hablar de más o
sin pensar lo que decimos. Cuánta enseñanza hay en
la oración de Jesús totalmente confiado en el Padre:

Mateo 26,39 En seguida Jesús se fue un poco más
adelante, se inclinó hasta tocar el suelo con la frente, y
oró diciendo: “Padre mío, si es posible, líbrame de este
trago amargo; pero que no se haga lo que yo quiero,
sino lo que quieres tú.”

Dios padre de amor: Muchas veces he sido imprudente,
orgulloso y falto de conocimiento en mi
oración, sugiriéndote o clamando lo que según mis
criterios deberías hacer, pero hoy, en el nombre de
Jesús, quiero pedirte perdón por mi ignorancia, y que
me ayudes a aceptar tu perfecta voluntad en mi vida y
la vida de quienes me rodean, porque sé que tienes un
plan maravilloso de vida para todos nosotros.
Amén.

 


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